viernes, 12 de noviembre de 2010

ÉTICA SOCIO-CORPORATIVA

Ayer, día 11/11/2010, tuve el honor de participar en una charla privada otorgada por Don Antonio Candela, directivo del grupo Valero, al respecto de la falta de juicio y valores dentro de las compañías de hoy en día. En este sentido, abarcamos temas concernientes a la ética en el trabajo, la responsabilidad de las empresas y todo aquello que engloba la buena “practis” en el mundo empresarial. Entre las conclusiones que obtuvimos ayer, hubo una que me abrió muy bien los ojos. ¿Podríamos estar ante una crisis de valores? ¿Es posible que la falta de rigor ético nos haya conducido a la mayor crisis financiera de la historia?
Para comprender mejor la dinámica de este post, os dejo las definiciones de ética y empresa por la RAE:
Ética: Conjunto de normas morales que rigen la conducta de la persona en cualquier ámbito de la vida. Ética profesional, cívica, deportiva.
Empresa: Acción o tarea que entraña dificultad y cuya ejecución requiere decisión y esfuerzo.
Es cierto que hay otras definiciones que no se han añadido pues no me voy a referir a las demás, sino que todo el artículo girará en torno a estos dos axiomas.
En ninguna de ambas definiciones se menciona la palabra “dinero” ni tampoco “rentabilidad” ni “productividad” ni “beneficio monetario”. En lugar de ellas encontramos “normas morales”, “dificultad”, “decisión” y “esfuerzo”. Fíjense que si tenemos en cuenta ambas definiciones podríamos concluir que la ética en la empresa es el conjunto de normas morales englobadas en una acción o tarea difícil y cuya ejecución requiere decisión y esfuerzo. Sin embargo, planteo una pregunta: si en la definición de empresa no se menciona que el objetivo primordial es la consecución de beneficio o rentabilidad, ¿porqué es esa la única finalidad que persiguen las “corporaciones” de hoy día? ¿Es posible que el “vale todo” se haya impuesto al placer de obtener un resultado que beneficie a un conjunto de personas?
El señor Antonio Candela nos transmitió una experiencia personal, por la cual con sus compañeros de trabajo se obligaron a enumerar una serie de conductas y comportamientos éticos comunes para todos, con los que cada persona se debería dirigir a su compañero. Es más, estableció que cuando este listado caló entre los compañeros, llegaron a transmitirle la disconformidad que había otro que no se regía por los mismos principios, llegando a afirmar que no podían continuar trabajando con esta persona aun cuando era eficiente en su trabajo. Este es un claro caso de creación de un buen ambiente laboral.
Sin embargo, yo voy más lejos. Mi percepción de empresa es diferente a la que por norma se conoce. Bajo mi punto de vista, aquellas empresas que sólo buscan maximizar beneficios están tocadas de muerte porque no siempre se puede conseguir este objetivo. No obstante, mi visión de empresa se remite a la definición propuesta por la RAE y no estrictamente a la consecución de un remanente. Por ende, lo que tengo por visión es un ente cuyo objetivo esté en las personas, ya sean sus trabajadores ya sean sus familiares ya sean personas externas a la sociedad. Me explico, es sencillo:
- Pongamos como caso que el objetivo de la empresa es “DAR DE COMER A 1000 NIÑOS AL CIERRE CONTABLE” y se establece que para dar de comer a 1 niño tenemos que disponer de 1€ al día. Por tanto, al año serán 365€ por niño que hace un total de 365.000€. Y ese es nuestro objetivo, generar ese beneficio para otorgarlo a la sociedad. Pero eso no es todo, porque para el año próximo se deberá incrementar los objetivos y dicho incremento no será posible sin la intervención de los empleados. Ahora bien, estos empleados tendrán derecho a visitar en su periodo vacacional la población donde va a parar el dinero y poder vivir la situación dramática que vive dicho pueblo hoy día. Al tener bien definido cual es su rol dentro de la sociedad y atendiendo al carácter ético de la acción propuesta por la empresa, el trabajador se sentirá partícipe del objetivo de la compañía y se sentirá motivado a conseguir la meta a alcanzar. Fíjense que la corporación no es una ONG, ya que a través de una acción industrial se genera riqueza para el trabajador y para la sociedad. El trabajador percibe su salario, digno, no abundante, pero en cambio la sociedad tiene mayor riqueza.
- Otro ejemplo podría ser la creación de escuelas o pozos u otros mecanismos de inversión social.
Es una forma diferente de ver el binomio sociedad-empresa (curioso que también se le denomine a la empresa como sociedad, S.A, S.L, etc.). Otra forma de empresa que puede ser posible. Y me temo que mis palabras caerán en el olvido y que toda situación vivida no habrá servido para cambiar nada ya que el dinero consigue olvidar hasta el mayor de los pesares.

A continuación les dejo un vidio de Don Manuel Guillen Parra durante una ponencia en la Universidad de Valencia.





Pueden disponer de las siguientes partes en el portal audiovisual "Youtube.com"

Muchas Gracias.

Emilio Planelles,
Economist & MBA by Fundesem Business School.

martes, 9 de noviembre de 2010

LA IMPORTANCIA DE NUESTRA AGRICULTURA

En 1986 cerca del 15% de la población española se encontraba empleada en el sector agrícola. En algunas zonas como Galicia este porcentaje se elevaba hasta el 40 o 45% de la población gallega. SIn embargo, en 2004 este sector queda relegado al olvido por parte de la población española siendo ésta empleada un 5,33% en este sector, siendo la aportación al PIB en torno al 2%.
La base del crecimiento económico actual, y en vista de ciertos pensadores, establece que la agricultura ha llegado a un estancamiento en el rendimiento y no consigue remontar el vuelo de la productividad. Esta ralentización la ha condenado a vivir por detrás de la industria. Además, en nuestro país se ha visto relevada por la industria de la construcción, la cual se ha aprovechado de su debilidad, sustituyendo los terrenos campestres por zonas urbanas.
Las mentes más liberales establecen que debemos tener una tasa de sustitución de la agricultura hacia sectores con mayor valor añadido, esto es, que la relación entre el precio final que se percibe por la mercancía vendida y el coste de elaborarla sea cada vez mayor. Esto lo hace muy bien países como Alemania y Japón. Por el contrario, esta hipótesis es evidente en dichos países pues están mucho más densamente poblados que el nuestro.
Ahora bien, en el horizonte se esbozan nuevos síntomas de debilitamiento del dólar y en la zona Euro temen que repercuta en una especulación con los precios del Brent. Por lo pronto se ha incrementado el barril del crudo en 15 dólares (a fecha de 09/11/2010) alcanzando los 88$. Si unimos este incremento con la escasez de cosecha de Rusia y el creciente apetito de China e India, esbozamos en el horizonte un periodo cuanto menos inquieto en el sector agrícola.
El incremento de las materias primas y, por ende, el de la cesta de la compra constreñirá aun más al debilitamiento del bolsillo de los españoles, haciendo que se debata con mayor entereza sobre la necesidad de tener una agricultura fuerte en un país desarrollado.
Por ende, el debate estará eternamente abierto como lo sigue estando el del sector minero y, en especial, el del carbón.

Emilio Planelles,
Economist & MBA by Fundesem Business School.

Fuentes:
Diario económico “Cinco Días”
Norba, revista geográfica. Artículo de F. Molinero Hernando
INE.